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EL BOBO Y LA YUCA ZURDA

30 de abril de 2023

No es que el Bobo de la Yuca haya comenzado con el pie izquierdo su presidencia, el problema del Bobo es que tiene dos pies zurdos.

Pensaba el Bobo de la Yuca cuando el viejito levantabrazos lo señaló con el dedo que había triunfado. Quedaba disfrutar de su presidencia de mentiritas, o sea, aprender de memoria cuanta babosería le escribiesen sus jefes y recitarlo como si fuese ideas propias. Lo mejor serían las visitas a provincias y centros productivos que terminaban en comelatas de película.

Más complicado resultaba cuando pasase un cicloncito pues tenía que esforzarse al poner cara de preocupación ante la gente que lo había perdido todo mientras con la cara de expresion cero les caía a promesas de ayudarlos a recuperarse y de no dejarlos desamparados. Luego tocaba respirar tranquilo, montarse en el BMW y dejarlos desamparados. ¿Así no era como su admirado Rey SADIM habían hecho siempre? Claro que sí y él no iba a romper la tradición, y gritó bien que el sería Continuidad como si fuese una idea propia aunque todos sabían que si no lo decía, se quedaba allí mismo.

Su valedero y escojedor no tenía mucho dónde escoger, pues el Bobo de la Yuca era el único subnormal que no había alcanzado su pijamas en la repartición ni tampoco había tenido tiempo de empacharse con las mieles del poder”. Tampoco era un gordo indecente en el momento de ser elegido (eso vendría después) y hasta caía un poco bien (porque no abría la boca). Aún se estudia si ya era un buen Bobo de la Yuca antes de presidente o desarrolló esa cualidad después que le regalaron el carguito, de todas manera ya da igual. Lo cierto es que no hubo que esperar ni un mes para que la gente empezara a rascarse la cabeza y a pensar que además de Bobo, estaba cagado de aura, pues pasaban cosas que antes no sucedían.

El 18 de mayo de 2018, el vuelo 972 de la compañía mexicana Global Air arrendado a Cubana de Aviación que salía de la Habana con destino a Holguín se estrelló poco antes de despegar. De los 113 ocupantes de la nave solo sobrevivió a la postre uno. (Desde aquí mi pensamiento para todos los que perdieron la vida en ese terrible accidente y para sus familiares mi sentido pésame y mis deseos de que se haga una justicia que nunca ha llegado). El Bobo reaccionó rápido despues que los muchachos de la seguridad lodijeron lo que tenía que hacer. Visitó el lugar del siniestro, caminó entre los pedazos de avión y baboseó hasta que todos estuvieron seguros que su palabra “Continuidad” venía en serio.

Más de un año demoró la investigación para esclarecer las causas del siniestro y mucho se habló de los problemas técnicos del aparato, al final todo se quedó en causas y si había responsables eran los muertos que no podían responder. La línea aérea se limpió el pecho y se hizo la loca como si con ella no hubiese sido y la justicia con los fallecidos y sus familias (casi todas cubanas) brilló por su ausencia. Nunca mejor dicha la palabra “Continuidad” a la vez que se le falta el respeto a los suyos y el Bobo se montó en el BMW, y respiró tranquilo. El sol calienta mucho en Cuba y derrite muy fácil el gen de la memoria.

Cuando todos pensaban que ya no pasarían más cosas malas ese año y que el chino del Bobo de la Yuca en vez de tenerlo atrás, estaba alante y agachado, explotó otro tremendo bombazo de mala suerte. En diciembre del 2018 los americanos divulgan un informe acerca de presuntos ataques sónicos al personal de la embajada americana en La Habana.

El Bobo solo tenía cerebro para repetir “yo no fui” varias veces seguidas. Tampoco quiso echarle el muerto a los rusos, porque aunque la gente no lo crea, es más pendejo que Bobo y pensando que como los americanos de la embajada vivían en Cuba el sol tambien les derretiría el gen de la memoria. NO tuvo en cuenta, como buen Bobo de la Yuca, que los que escribían el informe de los ataques acústicos vivían un poquito más al norte.

En vez del olvido a los tipos del informe lo que les dio fue el gen de la ladilla, lo sacaron por todos los periódicos y pincharon más a Trump que un brujero a su muñeco vudú. Trump entonces dominado por el maligno y con tremenda picazón en los lugares donde los brujeros le encajaban los alfileres, cerró la embajada americana en La Habana pal carajo y ordenó recoger los matules y cantándole el estribillo de “tunturuntu”, mandó a todo el mundo pa su casa.

El Bobo de la Yuca seguía repitiendo “yo no fui, yo no fui” con mucho miedo que su valedor lo castigase por Bobo y lo castigase por lo que no había hecho. Él sabía del trabajo que había pasado el viejito levantabrazos para convencer a los americanos de un trueque justo entre tres espías enjuiciados y condenados a cadena perpetua por un viejo sin dientes que regalaba celulares.

Las embajadas duraron abiertas lo que un merengue en la puerta de un colegio al Bobo lo escondieron en un cuarto y lo cerraron por fuera porque seguía repitiendo “yo no fui” como un papagayo amaestrado. Los americanos se habían puesto quisquillosos y no le creían al Bobo porque tenía, y tiene, cara de comemireda y pestañeaba mucho al hablar, lo que es un síntoma inequívoco de ser mentiroso. Lo que los americanos no sabían y se enteraron después era que el Bobo pestañeaba por miedo a que descubrieran a la familia de fantasmas chinos que vivían a su alrededor.

Los americanos al final se cansaron de presionar Bobo repetidos de “yo no fui” porque se convencieron que era un animal amaestrado. Entonces el viejito levantabrazos le dió dos latigazos de castigo y le gritó que no quería escuchar otro “yo no fui”. El Bobo que no tenía, ni tiene ideas propias comenzó a decir“yo no sé quién fue, yo no sé quien fue”.

Todo el mundo sabe que no fue el Bobo de la Yuca, pero entonces, ¿quién fue el de los ataques? Y claro que te lo voy a contar en el próximo capítulo. Sígueme para que te enteres de todo lo relacionado con los ataques sónicos y hasta se lo digas a los americanos para ayudarlos que pareceb perdidos.

si no has leído el primer capítulo haz click aqui:

Primer Capítulo: EL BOBO DE LA YUCA