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CREMA DE PLACENTA DE PUERCA Y HECES DE BEBÉ PARA EL CUTIS DE LA TÍA

21 de septiembre de 2020

-Hola tía, ¿como estás?

-Ay mijo, que susto.

-¿Qué pasó?

-Esto aquí fue muy grande con el terremoto.

-¿Se sintió en terremoto en La Habana?

-Lo suficiente para cagarse

-¿Dónde tu estabas?

-En el wifi,

-Pero si tú tienes poco saldo.

-De todas maneras yo vengo todos los días a enterarme de chismes.

-Cuéntame como fue la cosa

-Fue como cuando tú pasas por donde rompen la calle con un martillo neumático pero sin ruido.

-Eso asusta

-Aquello fue una locura, del edificio del lado salió una vieja gritando con las manos para arriba, “SISMO, SISMO,SISMO”, estaba muy nerviosa y corría desesperada como un demonio calle abajo, yo creo que todavía está corriendo.

-Pobre señora.

-Eso no es nada, se armó tremenda gritería y nerviosismo, en eso salió Pancho, el jefe de zona de los CDR,

-Tú dirás el hijo de Pancho tía porque ese viejo tiene que estar muerto hace rato, ¿O es el mismo Pancho que yo conozco?

-El mismo Pancho que conoces.

-¿No me digas que ese Pancho esta vivo tía?, ¿Y todavía sigue en la Zona?

-Dice la gente que se le olvidó a la pelúa venir a buscarlo. Está hecho un viejo cagalitroso, todo cañengo y medio sordo, pero el día que lo saquen de la zona, se muere de tristeza. Te cuento que Pancho se puso a organizar aquello y a decirle a la gente que él iba a agarrar a ese Sismo contrarevolucionario donde quiera que se metiese. Y la gente le decía que no, que estaba confundido con la palabra y él, que no oye nada, seguía hablando de lo mismo.

-¿Y cómo terminó ?

-Que salió Pancho con su pandilla de viejos flacos a buscar a Sismo por el barrio, eran como siete u ocho y hacían como tres mil años entre todos ellos juntos. Y menos mal que fueron por el medio de la calle porque aquellos viejos intentando apurarse se caen en cualquier acera rota y se joden una cadera o peor, se caen dos viejos juntos y en el reguero de huesos no se sabe cual le toca a cada uno.

-¿Y Pancho agarró a Sismo?

-Muchacho, todo el mundo salió de las casas y se fue para el parque wifi, porque tenían miedo que hubiera réplicas.

-¿Y cómo la gente sabe que pueden haber réplicas si en La Habana nunca hay terremotos?

-Porque aquí ya hay más gente del Oriente de Cuba que de La Habana y allí si hay temblores. Te cuento que con tanta gente reunida, la policía se preocupó y fueron para allá, por si al tumulto se le ocurría ponerse a gritar cosas.

-¿Y gritaron?

-Ganas no faltaron, pero la gente estaba muy desganada, no sé si por la falta de proteínas o el miedo.

-El miedo se te mete dentro del cuerpo y no es fácil sacarlo.

-Yo no sé de qué miedo tú hablas pero no me vas a coger de atrás pa’lante, miedo al terremoto digo yo.

-Ah, embaraja ahora tía, bueno termina de contar,¿Y qué pasó con Pancho?

-Espérate mijo que no me dejas hacer el cuento. Como a las dos horas se apareció el delegado del Poder Popular. Tú sabes que el solo puede dar muela, porque tiene el mismo poder que una gallina en una granja avícola,

-¿Hay granjas avícolas en Cuba todavía tía?

-Ha’te el gracioso, mejor sigo el cuento, el Delegado fue a apaciguar a la gente asustada. Pero el hombre también es un jodedor y al ver regresar a Pancho con su tropa de tres mil años y dos sospechosos le dijo que le informara del estado de las cosas. “Deme un parte Pancho”, así le dijo.

-¿Y qué respondió Pancho?

-Estás tú hoy del carajo y con tus preguntas capciosas y tú jodedera no me dejas desarrollarme, deja de interrumpir que me cortas el hilo. Pancho a sus superiores siempre le dice “A sus órdenes”, tú sabes que él mete el cuento que fue del 26 de Julio, pero lo único que hizo fue llevarle una carta a uno que se exiliaba en una embajada.

-Tía que no me terminas el cuento, ¿por fin qué informó Pancho?

-¿Cuál es tu desespero? no me agites que me fermento.

-OK tía, tranquila, pero cuenta que me intrigas

-Voy a hacer como que no te oí, mira, Pancho le dijo que no habían podido agarrar a Sismo, pero tenía a dos sospechosos para interrogar, y que ya había activado a sus informantes para que cuando apareciera el contrarevolucionario poder apresarlo. La gente y  hasta los sospechosos aguantaban la risa. El delegado le preguntó entonces que por que se había demorado tanto. ¿Y sabes qué le dijo el viejo?

-¿Qué le dijo?

-Le dijo, “Oigame pero es que con este problema del terremoto todos estamos muy asustados y ese Sismo se ha aprovechado de la confusión para escapar”. Y entonces ya no hubo manera de aguantar la risa.

-Pobre Pancho,

-Que va niño, si él ni se enteró y siguió dando órdenes para agarrar a Sismo y se llevó a los sospechosos para la zona.

-¿El tío y los primos se asustaron mucho?

-A tu tío lo cogió en la cola para coger la balita del gas, lleva una semana haciéndola.

-¿Se asustó mucho?

-¿Tú crees que el animal ese se asusta con algo?, Solo cuando en las noches me pongo mi crema humectante coge miedo.

-¿Y esa crema de qué es?

-Buenísima que es, desde que me la pongo tengo la cara que parece el culito de un bebé, claro que un poquito de peste si tiene, pero nada es perfecto.

-¿La venden en las tiendas allá?

-Está bueno ese chiste de que venden algo en las tiendas TRD, eso es un experimento del Polo Científico. Mi amiga de Biotecnología me la trajo, está hecha con placenta fresca de puerca mezclada con heces fecales de bebé.

-Tía pero eso es mierda.

-No seas tan agresivo, dile mejor heces de bebé además no es mierda pura porque tiene un porcentaje de placenta de puerca y por tu culpa acabo de decir “mierda”. De todas maneras el resultado es buenísimo, a un gustazo un trancazo ¿o no?

-Si tú lo dices, pero ahora entiendo el susto del tío, ¿y tú te metes la noche entera con la crema o es solo un ratico?

-Para un resultado óptimo tengo que estar la noche entera, pero solo lo hago dos o tres veces por semana porque me da dolores de espalda.

-¿No jodas que la mierda de niño también da dolor de espalda?

¡No jodas más con la mierda de niño que suena feo dicho así, heces de bebé con placenta de puerca carajo!, además las heces de bebé no dan dolor de cabeza, el problema es que esas noches tengo que dormir boca arriba y sin mover la cabeza y no de lado como me gusta.

-Me imagino que si te giras para el lado del tío con eso en la cara le provocas un infarto.

-Qué clase de comemierda tú eres, si no me puedo virar es para no manchar la almohada de heces con placenta que la mancha no hay quien la quite después.

-Con esa peste tienes que botar la almohada entonces.

-Tú estás loco, ¿de dónde saco una almohada yo entonces?, esa almohada es de cuando mis padres se casaron.

– Pa’l diablo que almohada más vieja,¿Y el experimento dura mucho?

-imagínate que tengo una pinta del mismo tamaño de la de helado que vendían antes de la crema metida en el congelador del refrigerador como si fuese helado de chocolate.

-Quien te iba a decir que ibas a tener el refrigerador lleno de mierda.

-¡Crema de placenta fresca de puerca con heces fecales de bebé carajo!, que no aprendes. No confundas.

-Bueno, ahora entiendo por qué el tío no le teme a los movimientos telúricos, él está preparado para cosas peores.

-Yo no sé qué es ese movimiento del lúdico que dices pero volviendo al terremoto cuando tú tío lo sintió se lanzó entre tercera y “short”a abrazar lo mas valioso, que era la balita del gas, como si se la fuesen a llevar. Déjame decirte que nadie se movió de la cola, no fuese a ser que llegara el gas y perdieran el turno. Ni cuando la vieja desesperada gritando “SISMO” les pasó por el lado corriendo.  Pero eso no es lo peor.

-¿Qué es lo peor?

-Que al siguiente día llegó el gas y cuando tu tío fue a comprarlo, no le tocaba.

-¿Cómo es eso? ¿calcularon mal?

-Es que ahora también hay problemas con el gas y para ahorrar alargaron como once días más el tiempo que debe durarte la balita.

-¿Y él qué hizo? ¿Protestó?

-Que va, todavía esta allí, esperando que pasen los once días, para ser el primero cuando le toque, de lo que me alegro sabes.

-Coño, que torturadora tú eres.

-Muchacho él está de lo más contento, así se entretiene conversando con sus amigos, y no esta metido en la casa llenándomela de gases, yo creo que la empresa del gas debería contratarlo. Que manera de tener gases ese viejo, y es super eficiente, porque para lo poco que come. Sobrecumple.

-¿No hay plantas de Biogás en Cuba?

-El día que pongan la primera, van a venir a buscar a tu tío. Él debe ser famoso en el edificio porque por la noche el sonido camina más y ese es su momento de mayor actividad.

-Una noche de crema y gases en aquel cuarto con ustedes debe ser para llorar, ¿Y los primos?

-Ni se enteraron del terremoto los insensibles esos, dicen que estaban en un guagua y quién va a sentir algo con el bacherío de las calles. pero a ese Cabezón y a su mujer la adicional almendra los voy a matar cuando los coja.

-¿Qué te hicieron?

-El domingo pasado me dice, “Mami ahora que tienes que ahorrar gas, no cocines hoy y te invito a una comida en casa de unos primos de mi esposa. Van a comer conejo”.

-Que rico.

-Tú sabes que a mi me gusta el conejo y me puse muy contenta, cuando llegamos había una fuente llena de pedazos de conejo y me di tal atracón, que la gente de la casa ya me miraba con los ojos reviraos y me alejaban los platos de comida con sutileza.

-¿Y por qué estas brava entonces?

-Muchacho, cuando estaban recogiendo los platos, una mujer le pregunta a un niño, que por qué no comió nada, y sabes que respondió.

-¿Qué dijo?

-Dijo que el gato estaba malo, yo pensé que tenían un gato en la casa y les comenté que tenía un amigo veterinario que les podría recomendar.

-Y les diste los datos del veterinario.

-El niño me miró entonces con cara de no entender y el padre reconoció que se le había pasado la mano con la sal.

-¿Te comiste el gato tía?

-Si hubiese sido uno solo, Una familia entera de gatos fue lo que me comí, si el Cabezón no se levanta y se manda a correr lo ahorco. Le caí detrás con un palo gritándole: me hiciste comer gato, me cago en tu madre.

-¿Lo alcanzaste?

-Desde ese día no lo veo, tengo el palo detrás de la puerta para reventárselo en la cabeza cuando regrese.

-¿Y el tío qué hizo?

-Qué se puede esperar de un espécimen que le de igual todo, relájate, me decía, pero si es conejo de verdad, pero conejo de tejado.

-¿Y el Gordo Tia?

-Yo debo tener un karma malísimo, porque lo que me está tocando en esta vida es de anjá y vale medio.

-¿Qué hizo el Gordo ahora?

-La guasasa lo cogió para hacer brujerías.

-No me digas eso.

-Yo que estaba contenta con ella porque era enfermera, pero el otro día fui a verlo y lo tenía acostado boca arriba y encuero encima de la mesa, todo lleno de agujas por el cuerpo.

-Acupuntura le estaba haciendo ¿no?

-Qué puntura, ni cupuntura, brujería, Vudú era lo que hacía, como un muñeco grande que le encajan pinchos para joder al otro, en eso estaban, me puse como una fiera y empecé a gritarles y a tirarles  cosas, El Gordo se ha levantado con una cara de susto , imagínate, encuero y lleno de pinchos que ni vestirse podía.

-Eso es medicina china tía.

-Qué china ni china, aquí estamos en Cuba, a enterrar pinchos a otro lado.

-Le jodiste la sesión de acupuntura.

-A hacer brujería lejos, bueno te dejo que por ahí viene Microsoft y voy a comprarle algo

-¿Quién es Microsoft?

-Uno que vende Salfuman pero la mujer lo dejó el pobre, dice ella que por ser Microsoft.

-¿Se volvió adicto al internet el hombre?

-Ese no sabe lo que es un móvil, lo dejó porque dice ella, que la tiene suave y pequeña.

-Qué clase de lengua tía. No me dijiste por fin cómo terminó lo de Pancho.

-Olvídate de Pancho que tengo que comprar Salfuman y se me va este, Microsoft ven acá, Microsooooooft, que está sordo ese hombre, oye y recuerda la recarga, que no se te olvide que te haces el guillao

-Es que he estado atareado en estos días y….

-Y no te lo voy a recordar pero tú quedaste en buscarme unas tetas de silicona. Y la recargaaaaaa, auxilio, recarga, recarga, recargaaaaaa.

-Tia espera que yo no te prometí nada, mira, tía, tía,…oye… me colgó.